El Arte de Enseñar.- Desde la mañana de ayer La Plaza de Armas de Cañete luce Banderas a media asta, en señal de duelo, por la muerte de quien fuera en vida Pierre Eduardo Gonzales Arias, joven san luisino que a sus cortos 24 años, ha pasado a la posteridad al haberse entregado en cuerpo y alma a la defensa de los intereses de su pueblo y de su tierra Cañete.
En San Luis, su pueblo, la plaza también luce banderas a media asta, y en la humilde vivienda sobrecogida por la tristeza de ver partir a su ser amado, se estan velando los restos mortales del joven padre de familia. Hasta allí se vienen congregando, no sólo familiares y vecinos, sino todos los cañetanos compañeros de lucha.
Es menester que se deslinden responsabilidades, y sean identificados y sancionados los responsables.
Pier Gonzales Arias, se convierte en un mártir defensor de la causa que unió a cañetanos de todas las edades, de todos los credos, de todos y cada uno de los rincones de este hermoso valle.
Serán justos todos los homenajes póstumos del que pueda ser efecto, pero insuficientes para aliviar, cubrir y sustentar las muchas necesidades que puedan en un futuro agobiar a su viuda y sus pequeños hijos.Esperemos que las autoridades y dirigentes sindicales, sepan conrresponder a esta entrega propia de héroes.
Los restos mortales de este valeroso cañetano serán inhumados esta tarde en su querido san Luis.
¡Resquiescat In Pace Pierre Eduardo! Tu muerte no ha sido inútil.
Cuando se votó por Humala unos pensaban que aplicaría su primer plan el de la gran transformación, otros pensaron que iba cumplir su segundo plan el plan de ruta garantizado por Toledo y Vargas Llosa, sin embargo era obvio que no podía quedar bien y satisfacer a ambos auditorios, hoy después de Cañete y Conga sabemos a quien estuvo engañando.
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